El Gobierno de la República del Perú anunció la ruptura de relaciones diplomáticas con los Estados Unidos Mexicanos, tras considerar que la concesión de asilo diplomático a Betssy Chávez Chino, exfuncionaria del expresidente Pedro Castillo, constituye una nueva acción de injerencia por parte del Gobierno mexicano en sus asuntos internos.
La decisión fue comunicada oficialmente luego de que la Embajada de México en Lima informara sobre el otorgamiento del asilo. Según el pronunciamiento del gobierno peruano, esta medida se suma a una serie de conductas que, desde diciembre de 2022, han sido calificadas como violatorias del principio de no intervención consagrado en el derecho internacional.
El Ejecutivo peruano señaló que, desde el intento fallido de golpe de Estado protagonizado por Pedro Castillo, México ha mantenido una postura que considera inadmisible y sistemática, pese a las reiteradas solicitudes de respeto a la soberanía nacional. La nota oficial subraya que estas acciones no corresponden con la relación histórica entre ambos países.
El Gobierno del Perú indicó que procederá conforme a lo establecido en la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas de 1961 y otras normas internacionales aplicables, reafirmando su carácter de Estado democrático de derecho y su compromiso con el respeto al orden jurídico internacional.
La ruptura diplomática marca un punto crítico en la relación bilateral entre México y Perú, en un contexto de tensiones acumuladas por diferencias en el tratamiento de asuntos políticos internos y decisiones consulares.