El Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) se comprometió a vigilar que el Proceso Electoral Extraordinario del próximo 1 de junio, en el que se elegirá por primera vez a integrantes del Poder Judicial de la Federación mediante votación, se realice conforme a los principios constitucionales y estándares internacionales de legalidad, paridad e imparcialidad.
La magistrada presidenta del TEPJF, Mónica Soto Fregoso, afirmó que el órgano jurisdiccional electoral garantizará que este proceso se desarrolle con apego a los principios de igualdad, transparencia y certeza, al recibir a la delegación de 80 visitantes extranjeros —40 mujeres y 40 hombres— provenientes de 16 países que observarán la jornada electoral.
El anuncio tuvo lugar durante un acto oficial encabezado por Soto Fregoso y la magistrada Janine Otálora Malassis, quienes presentaron un balance de las labores jurisdiccionales de la Sala Superior. De las 3,864 impugnaciones recibidas en este contexto electoral, se han resuelto 3,836, lo que representa el 99.27% del total, según datos compartidos por la magistrada presidenta.
Otálora Malassis subrayó la función del Poder Judicial como garante del equilibrio institucional y defensor de los derechos fundamentales. Señaló que este proceso se inscribe en un contexto donde se prueba la capacidad del sistema democrático para mantenerse funcional bajo mecanismos de contrapeso, recordando que la independencia judicial es esencial en cualquier régimen democrático.
En su intervención, la magistrada también destacó los Principios de Bangalore sobre la conducta judicial como referencia internacional en la materia, aludiendo a la necesidad de que las personas juzgadoras cuenten con competencias, independencia e imparcialidad para ejercer su labor.
La elección de juezas y jueces federales mediante voto ciudadano representa un hecho sin precedentes en el sistema judicial mexicano, lo que ha generado atención tanto nacional como internacional. La presencia de misiones de observación busca dotar de mayor legitimidad al proceso, en un contexto donde distintas voces han cuestionado el modelo propuesto y su posible impacto en la autonomía judicial.
El TEPJF reiteró que, conforme a sus atribuciones constitucionales, se mantendrá vigilante del desarrollo del proceso y del cumplimiento de los principios que rigen el sistema electoral y el Estado de derecho.