El senador Toño Martín del Campo expresó serias preocupaciones sobre las recientes reformas constitucionales aprobadas en el Senado, particularmente en lo referente al Poder Judicial. El senador denunció que estas reformas representan una amenaza directa a la democracia y al sistema jurídico del país, permitiendo un control casi absoluto de Morena y sus aliados sobre el Poder Judicial.
Martín del Campo destacó que una de las reformas más polémicas es la de la «supremacía constitucional,» aprobada sin análisis suficiente y con el fin de impedir cualquier acción de inconstitucionalidad contra decisiones legislativas. Según el senador, esto significa que todas las decisiones de Morena estarán protegidas contra cualquier forma de controversia legal, eliminando así un importante mecanismo de balance de poderes.
El senador también criticó la premura con la que se implementaron estas reformas antes de la toma de posesión de la presidenta Claudia Sheinbaum, argumentando que debieron esperar para permitir un análisis más profundo. Además, advirtió sobre una «embestida» contra jueces y magistrados que se oponen a estas reformas, lo cual podría llevar a un entorno de mayor represión y control.
En cuanto al panorama internacional, Martín del Campo mencionó la posible repercusión de estas reformas en las relaciones con Estados Unidos, específicamente en el contexto del Tratado de Libre Comercio (T-MEC). Señaló que el incumplimiento de México con los requisitos del T-MEC podría desencadenar sanciones económicas severas y afectar la estabilidad del país.
Finalmente, el senador instó a la presidenta Sheinbaum a acatar las decisiones de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), destacando que esta sería una oportunidad para demostrar su compromiso con el estado de derecho y la democracia. La resolución de la SCJN sobre la acción de inconstitucionalidad propuesta por los partidos de oposición será crucial y podría determinar el futuro del equilibrio de poderes en México.
El senador concluyó su intervención reiterando la necesidad de mantener una democracia sólida y un sistema judicial independiente, pilares fundamentales para el desarrollo y la justicia en el país.