Los Raiders de Las Vegas llegan a la Semana 2 tras una dolorosa derrota ante los Chargers por 22-10, listos para enfrentar un nuevo desafío: los Baltimore Ravens en el hostil M&T Bank Stadium. El equipo de Plata y Negro busca revertir su mal inicio de temporada y enfrentarse a una de las mayores amenazas de la NFL, Lamar Jackson.
Este encuentro promete ser una batalla en las trincheras, donde el juego terrestre de ambos equipos será clave para definir el marcador. El duelo entre el tackle defensivo de los Raiders, Christian Wilkins, y el centro estelar de los Ravens, Tyler Linderbaum, será uno de los enfrentamientos decisivos. Wilkins, quien tuvo una destacada actuación en su debut, tendrá la difícil tarea de penetrar la línea ofensiva de los Ravens y frenar a Lamar Jackson, una auténtica amenaza dual en el campo.
Por su parte, Robert Spillane, linebacker de los Raiders, deberá contener al dinámico Jackson. Spillane viene de liderar a su equipo con 10 tackles en la Semana 1 y tendrá que estar en su mejor nivel para evitar que Jackson desate su letal combinación de pases y carreras, la cual ya quedó demostrada con las 395 yardas combinadas que acumuló en el partido inaugural.
Otro enfrentamiento clave será el del corredor Zamir White, quien buscará redimirse tras un primer partido difícil. White tendrá que superar a la férrea defensa liderada por Roquan Smith, quien fue seleccionado al Primer Equipo All-Pro en 2023. Smith, conocido por su liderazgo e intensidad, es uno de los pilares defensivos de los Ravens y un reto considerable para la ofensiva terrestre de los Raiders.
Los Raiders saben que para tener éxito en Baltimore deberán ejecutar a la perfección, controlar el balón y, sobre todo, frenar a Lamar Jackson, un mariscal de campo capaz de desbalancear cualquier defensa.