El SoFi Stadium será escenario de un duelo que va más allá de la competencia divisional entre Rams y Seahawks. Este domingo, el receptor Puka Nacua enfrentará por primera vez como rival a Cooper Kupp, su excompañero y mentor durante sus dos primeras temporadas en Los Ángeles. El partido, programado para las 13:05 horas (PT), marca un punto emocional en la carrera de Nacua, quien reconoce que este encuentro tiene un significado especial.
Kupp, liberado por los Rams en el receso previo a la actual temporada y posteriormente fichado por Seattle, dejó una huella profunda en el desarrollo profesional de Nacua. Desde el primer día, la relación entre ambos se construyó sobre la base del respeto, la guía y la camaradería. Nacua recuerda con detalle los momentos compartidos, desde las sesiones de video hasta las conversaciones por videollamada cuando Kupp se ausentó brevemente tras el nacimiento de su tercer hijo.
La admiración de Nacua por Kupp se traduce en gestos y palabras que revelan una conexión que trasciende el campo. “La comodidad que sentí con él y la comunicación que hemos ido construyendo desde el primer día hasta ahora me han resultado muy gratificantes”, expresó Nacua, quien también destacó la meticulosidad de Kupp en cada aspecto de su preparación.
El posible intercambio de camisetas al final del partido se perfila como un símbolo de esa relación. Nacua fue claro: si hay una camiseta número 10 de los Seahawks en juego, él espera quedarse con ella. “Sinceramente, espero que no se lo quite, porque si lo veo quitárselo a otro, podría golpear a alguien de nuestro equipo”, dijo entre risas, dejando ver que el vínculo con Kupp sigue intacto.
El último entrenamiento de Kupp en Los Ángeles fue una despedida informal, pero significativa. Nacua estuvo presente, no para cerrar un ciclo, sino para reafirmar que la conexión permanece. “Sé que no es la última vez que te veré”, le dijo entonces. Hoy, esa frase cobra sentido en un partido que, más allá del resultado, será una celebración del respeto entre dos jugadores que comparten historia, valores y una amistad que resiste los cambios de uniforme.
El duelo entre Rams y Seahawks será también el escenario de una narrativa personal que se entrelaza con la competencia profesional. Mentor y aprendiz se reencontrarán en lados opuestos del balón, pero unidos por una historia que comenzó en el vestidor y que este domingo se escribe en el campo.