En respuesta a una reciente editorial del Wall Street Journal (WSJ), el presidente Andrés Manuel López Obrador arremetió contra el diario estadounidense por sus críticas y acusaciones de que seguirá ejerciendo el poder detrás del trono tras su mandato. Durante su conferencia matutina, López Obrador calificó la editorial como una falta de respeto a Claudia Sheinbaum, la posible sucesora, y a las mujeres en general, subrayando que el WSJ demuestra un desconocimiento completo de sus convicciones e ideales.
López Obrador acusó al Wall Street Journal de basar su información en fuentes como Enrique Krauze, Jorge Castañeda y Héctor Aguilar Camín, quienes, según él, no reflejan la realidad de México. Aseguró que el diario está equivocado y que sus críticas son inventadas. Además, minimizó la influencia del WSJ en México, afirmando que es leído por solo el 0.0001% de la población, y extendió esta crítica a medios nacionales como Reforma y El Universal, insinuando que tienen poca audiencia.
El presidente aprovechó la ocasión para instar a la oposición a reflexionar y evitar aspiraciones hacia un partido único o una dictadura. Subrayó la importancia de fomentar una democracia auténtica donde el pueblo tenga el poder de decisión. López Obrador reiteró su compromiso con la democracia y expresó su satisfacción de que, según sus cifras, al menos 30 millones de las 35 millones de familias en el país reciben una porción del presupuesto nacional, destacando los beneficios sociales de su administración.
Estas declaraciones se enmarcan en un contexto político en el que López Obrador busca consolidar su legado y asegurar la continuidad de su proyecto a través de su sucesora potencial, Claudia Sheinbaum. Sus críticas a medios de comunicación y opositores reflejan la polarización y el debate constante sobre la dirección del país y la interpretación de los logros y desafíos de su administración.
López Obrador continúa defendiendo su visión y políticas, abogando por una mayor inclusión y participación ciudadana en el proceso democrático, mientras se enfrenta a críticas tanto nacionales como internacionales sobre su gestión y su influencia futura en la política mexicana.