Cuando todo parecía perdido y los Mets de Nueva York estaban a punto de cerrar su temporada, Pete Alonso emergió como el héroe inesperado al conectar el batazo más importante de su carrera. Con un jonrón de tres carreras en la novena entrada, Alonso selló la victoria de los Mets por 4-2 sobre los Cerveceros de Milwaukee, asegurando así el pase del equipo a la Serie Divisional de la Liga Nacional, donde se medirán a los Filis de Filadelfia.
El emocionante desenlace llegó cuando los Mets se encontraban a tan solo dos outs de la eliminación en el Juego 3 de la Serie de Comodín. El presidente de operaciones de béisbol de la franquicia, David Stearns, describió el partido como “uno de los juegos más grandes en la historia de los Mets”. Ahora, el equipo de Queens se prepara para enfrentarse a su rival divisional, Filadelfia, con el Juego 1 de la serie al mejor de cinco programado para el sábado a las 4 p.m. ET en Filadelfia, transmitido por FOX.
La historia del encuentro cambió radicalmente en la novena entrada. Los Mets estaban abajo en el marcador 0-2, luego de que Jake Bauers y Sal Frelick conectaran jonrones consecutivos en la séptima entrada para Milwaukee. Sin embargo, los Mets comenzaron a responder con una base por bolas obtenida por Francisco Lindor y un hit crucial de Brandon Nimmo. Con ambos en base, Pete Alonso se enfrentó al cerrador de los Cerveceros, Devin Williams, y envió la pelota al jardín contrario, impulsando tres carreras y enmudeciendo al American Family Field.
Este cuadrangular convirtió a Alonso en el primer jugador en la historia de las Grandes Ligas en conectar un jonrón para darle la ventaja a su equipo estando abajo en la novena entrada o más tarde de un juego de eliminación en la postemporada. La hazaña dejó al público presente en completo silencio, mientras los Mets celebraban eufóricos en el diamante.
«Te imaginas esas situaciones cuando eres un niño pequeño», comentó Alonso, visiblemente emocionado en la celebración del equipo. «Estás en los playoffs, abajo por dos carreras, y simplemente sueñas con hacer algo como esto. Las palabras no lo pueden explicar».
La importancia de este jonrón fue doble para Alonso, quien venía de una mala racha al bateo con apenas cinco hits en sus últimos 41 turnos y sin extrabases desde el 19 de septiembre. Además, su contrato está por vencer, y este momento heroico podría tener un impacto positivo en su futuro con el equipo. «El peso de las emociones sobre él, acumuladas durante semanas, y la manera en la que se liberó en este momento crucial para el equipo… es difícil ponerlo en palabras», comentó Brandon Nimmo sobre el momento que vivió Alonso.
El dominicano Starling Marte también fue clave para los Mets, al conectar un sencillo impulsador que ayudó a consolidar la victoria. Por su parte, el boricua Edwin Díaz se llevó el triunfo tras la sólida labor del zurdo colombiano José Quintana, quien mantuvo a los Cerveceros sin anotaciones durante seis entradas. José Buttó, el venezolano que tomó la loma por los Mets, no pudo evitar que Milwaukee tomara la delantera, pero David Peterson entró en la novena para cerrar el partido, logrando una doble matanza crucial para asegurar la victoria.
Con esta victoria épica, los Mets se preparan para enfrentar a los Filis en la Serie Divisional, con un impulso emocional que podría ser determinante en su búsqueda del título. El desafío será grande, pero con el poder de bateo de Alonso y la energía del equipo en su máxima expresión, Nueva York sueña con seguir haciendo historia en la postemporada.