A 30 años del histórico mensaje que pronunciara Luis Donaldo Colosio Murrieta en el Monumento a la Revolución, su hijo, el senador Luis Donaldo Colosio Riojas, aseguró que ese discurso sigue siendo actual, pues refleja muchas de las aspiraciones no cumplidas de México.
Durante una rueda de prensa, el legislador de Movimiento Ciudadano consideró que la visión plasmada por su padre en 1994 continúa siendo un referente ético y político que interpela a la clase gobernante: “El discurso sigue vigente porque muchas de las carencias que ahí se señalaron siguen sin resolverse; la transición democrática en México ha sido, en el mejor de los casos, inconclusa”, afirmó.
Colosio Riojas subrayó que las palabras de su padre siguen siendo un llamado a construir un país incluyente, justo y con oportunidades para todos. Lamentó que las estructuras de poder se hayan renovado sólo en apariencia, sin lograr un cambio de fondo en el sistema político.
“El mensaje de mi padre es un llamado permanente a la conciencia pública y una brújula ética para quienes desean transformar el país desde el servicio y no desde la ambición personal”, expresó.
Un discurso que marcó época
El 6 de marzo de 1994, Luis Donaldo Colosio Murrieta —entonces candidato del PRI a la presidencia— pronunció un discurso que rompió con la tradición oficialista de su partido. En él reconoció un México con hambre y sed de justicia, con ciudadanos agraviados por la prepotencia de las autoridades y un sistema político que debía abrirse a la democracia real.
Ese mensaje fue considerado por muchos como un parteaguas: una señal de que dentro del mismo régimen surgía una voz que demandaba un cambio auténtico. A solo 17 días después, el 23 de marzo, Colosio fue asesinado en Lomas Taurinas, Tijuana, en un crimen que aún genera dudas y controversias.
A tres décadas de aquel episodio, su hijo considera que ese discurso no pertenece al pasado, sino al presente: un espejo en el que la clase política actual debería mirarse.