En una exhibición de poder y dominio en el montículo, Edward Cabrera y la ofensiva de los Marlins de Miami no dieron tregua a los Filis de Filadelfia, imponiéndose con una contundente victoria de 10-1 en el loanDepot park. Cabrera, con una actuación magistral, y Connor Norby, con dos jonrones, fueron las estrellas de la noche en una jornada que dejó claro el potencial de Miami.
El lanzador dominicano Edward Cabrera (4-6) ofreció una de sus mejores actuaciones de la temporada, lanzando siete innings sin permitir carreras. Cabrera se mostró implacable, recetando seis ponches y permitiendo solo tres hits, con un boleto. Su dominio fue tal que no permitió un hit hasta el sexto inning, cuando Brandon Marsh logró conectar un sencillo. Cabrera, quien había sido descartado para abrir el viernes debido a síntomas de migraña, demostró que estaba completamente recuperado y en forma.
La ofensiva de los Marlins también brilló con fuerza. Connor Norby fue una máquina de producir carreras, conectando dos cuadrangulares que contribuyeron significativamente al marcador final. El novato Griffin Conine tuvo una noche destacada al conectar tres hits, mientras que el dominicano Jesús Sánchez también hizo su parte con un imparable y una anotada.
El venezolano Javier Sanoja, por los Filis, se destacó a pesar de la derrota, logrando un doble y un sencillo, y anotando dos carreras. Sin embargo, el esfuerzo no fue suficiente para contrarrestar la ofensiva arrolladora de los Marlins y la actuación estelar de Cabrera.
La victoria de los Marlins no solo subraya su capacidad para dominar en casa, sino que también añade presión a los Filis, quienes lideran la División Este de la Liga Nacional. Con esta victoria, los Marlins siguen aferrándose a sus esperanzas de postemporada, mientras que los Filis deben ajustar su estrategia para mantener su posición en la cima de la división.
El espectáculo en Miami dejó claro que los Marlins están listos para cualquier desafío y que su alineación, combinada con una sólida actuación en el montículo, puede ser una amenaza significativa en la recta final de la temporada.