Con el objetivo de “proteger el derecho humano a un medio ambiente sano”, la Comisión Estatal de los Derechos Humanos (CEDH) de Michoacán declaró como espacios 100% libres de humo de tabaco sus oficinas ubicadas en Morelia y en el interior del estado. La medida fue anunciada el 5 de junio, coincidiendo con el Día Mundial del Medio Ambiente.
Según el comunicado oficial, esta acción busca garantizar un entorno ecológicamente equilibrado, libre de contaminación, tanto para personas trabajadoras como usuarias. Sin embargo, no se detallaron diagnósticos previos que sustenten la necesidad de esta medida ni mecanismos de supervisión para su cumplimiento efectivo.
El concepto de “espacio libre de humo” se refiere a la ausencia total de actos de fumar o vapear dentro de las instalaciones. La CEDH argumenta que esta decisión se alinea con su obligación de preservar el medio ambiente, aunque no presentó datos sobre niveles de exposición al humo previos a esta medida ni estimaciones del beneficio ambiental resultante.
Además del veto al humo de tabaco, el organismo mencionó otras acciones como el uso de iluminación LED y la separación de residuos. Sin embargo, no se especificó cuántas oficinas cuentan ya con infraestructura adecuada para el reciclaje ni se presentaron cifras que muestren ahorro energético o reducción de huella de carbono.
Tampoco se comunicó si estas acciones forman parte de un plan institucional más amplio en materia ambiental o si se cuenta con una política interna que incluya auditorías, metas anuales o estrategias transversales de sostenibilidad.
La CEDH hizo un llamado a las personas usuarias a respetar la disposición, apelando a la responsabilidad individual. No obstante, no se informó si habrá sanciones, señalización permanente o protocolos de actuación en caso de incumplimiento por parte del público o del personal.
A pesar de enmarcarse en una fecha significativa como el Día Mundial del Medio Ambiente, la medida fue anunciada de forma unilateral, sin coordinación visible con autoridades ambientales estatales o municipales ni con organizaciones especializadas.
Con esta decisión, la CEDH Michoacán se suma a otras instituciones públicas que promueven entornos libres de humo como parte de una agenda ambiental. Sin embargo, la ausencia de lineamientos técnicos y de herramientas para medir sus efectos pone en duda la capacidad de estas medidas para trascender lo simbólico y generar un cambio estructural en favor del medio ambiente.