Gobierno de México rechaza incremento de aranceles al acero y aluminio impuesto por EUA

by Enlace Noticias

La presidenta Claudia Sheinbaum manifestó su desacuerdo con la decisión del gobierno de Estados Unidos de elevar al 50 por ciento los aranceles al acero y al aluminio, medida que calificó como perjudicial para la economía mexicana y carente de sustento en el marco del actual acuerdo comercial entre ambos países.

Durante su conferencia matutina del 4 de junio, Sheinbaum señaló que, en el caso específico de México, no se justifica la aplicación del arancel debido a que el país importa más acero y aluminio del que exporta. “Formalmente se pone un arancel cuando hay un déficit, pero en nuestro caso hay un superávit de importación”, explicó.

La mandataria federal indicó que la medida representa una presión directa sobre la industria nacional, tanto en el empleo como en los costos de producción. Advirtió que el aumento de aranceles podría tener efectos en cadena en sectores estratégicos como el automotriz, al señalar que muchas autopartes y componentes metálicos cruzan la frontera varias veces antes de su ensamblaje final.

Sheinbaum anunció una reunión con representantes de las Cámaras del acero y del aluminio para evaluar los impactos del anuncio y delinear posibles acciones. Asimismo, informó que el secretario de Economía, Marcelo Ebrard, sostendrá conversaciones con su homólogo estadounidense, Howard Lutnick, como parte de una vía diplomática para buscar acuerdos.

En su mensaje, la presidenta subrayó que, aunque se mantiene la colaboración con el gobierno de Estados Unidos en temas como la seguridad, cualquier entendimiento debe basarse en el respeto mutuo y en condiciones de igualdad.

El gobierno federal continuará promoviendo el llamado “Plan México”, estrategia que, según la mandataria, busca fortalecer las capacidades industriales nacionales y disminuir la dependencia de insumos externos en sectores clave.

Hasta el momento, no se ha informado si la medida será impugnada en instancias comerciales multilaterales, aunque el Ejecutivo dejó abierta la posibilidad de insistir en el diálogo para modificar la decisión del gobierno estadounidense.

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