Once integrantes de la Guardia Nacional fueron detenidos y desarmados tras ser sorprendidos en el momento en que presuntamente extraían ilegalmente combustible de ductos de Petróleos Mexicanos (PEMEX), en el municipio de Apaseo el Alto.
De acuerdo con los reportes oficiales, entre los detenidos se encuentran dos tenientes, un subteniente y ocho elementos en funciones de guardias. Todos fueron puestos a disposición de las autoridades competentes para el inicio de las investigaciones correspondientes.
La Guardia Nacional fue creada durante la administración del expresidente Andrés Manuel López Obrador, como parte de una estrategia para sustituir a la Policía Federal, luego de diversos señalamientos de corrupción dentro de esa corporación. Su diseño institucional contempló la participación de elementos provenientes de las Fuerzas Armadas y cuerpos policiales, bajo un esquema de coordinación federal.
El caso se produce en un contexto de preocupación nacional por el crecimiento del robo de combustible —conocido como huachicoleo—, una actividad que ha afectado de forma recurrente la infraestructura de PEMEX en diversas regiones del país. El involucramiento de personal de fuerzas de seguridad en este tipo de actividades ha sido objeto de investigaciones en años anteriores.
Hasta el momento, la Secretaría de la Defensa Nacional y la Guardia Nacional no han emitido declaraciones públicas sobre la situación legal de los detenidos ni sobre las medidas internas adoptadas tras el incidente.
Organismos especializados en seguridad han señalado previamente la necesidad de establecer mecanismos más estrictos de control interno y supervisión operativa dentro de las instituciones de seguridad pública para prevenir posibles actos de corrupción o colusión con grupos dedicados a actividades ilícitas.